viernes, febrero 04, 2005

"Cultura no rima con mercado".

"La voz de los creadores se hizo oír alta y clara ayer [1-2-2005] en el Parlament de Catalunya. La iniciativa reúne a 400 participantes, músicos, directores audiovisuales, guionistas, dramaturgos y coreógrafos de toda España.
Carmen Calvo, ministra de Cultura, se mostró beligerante en la defensa de la diversidad cultural. "Algunos quieren hoy una cultura que sirva como simple valor de mercado e intercambio. Por eso, debemos librar un combate a favor de la diversidad, un compromiso de protección hacia aquellos que generan cultura, porque ésa es la única forma de tener cultura", dijo. Para Calvo, "la cultura encaja mal" en algunas poderosas instituciones internacionales, como la Organización Mundial del Comercio, "porque les cuesta trabajo concebir la cultura como algo distinto a un negocio".
También muy combativo se mostró el Nobel Saramago, recién llegado del Foro de Porto Alegre, en un largo discurso en el que se mostró contrario a la equiparación del escritor como mero inversor en sus obras y sus derechos.
Las conclusiones de los debates serán trasladados al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero".
La Vanguardia.

"Mercado rima con cultura".
“¿Sabe vd. qué es el AGCS? No le suena, ¿verdad? No se preocupe, es normal. Es más, se trata de eso, precisamente. Así no relacionará usted con estas siglas una serie de cosas que le pasan y que le van a pasar en el futuro”.
Attac. Los servicios públicos y el Acuerdo General de Comercio de Servicios”. Madrid. Ap. Correos 2621.

(AGCS: Acuerdo General de Comercio de Servicios, propiciado por la OMC, y suscrito ya por más de cien países –entre ellos, España- mediante el cual los servicios esenciales para la sociedad –incluida la educación y la cultura -, que ahora son atendidos bajo responsabilidad de los poderes públicos gracias al patrimonio común que la ciudadanía mantiene con sus impuestos, pasarán a ser prestados bajo las reglas del mercado transnacional, como cualquier otra mercancía).

Una de cal.
Resolución del Parlamento Europeo.
(PS_TA-PROV -2003- 0087).
“Vista la declaración universal de la UNESCO sobre diversidad cultural en la que se subraya el ‘carácter específico de los bienes y servicios culturales que, en la medida en que son portadores de identidad, de valores y sentido, no deben ser considerados como mercancías o bienes de consumo como los demás? (Art. 8), y también que ‘las fuerzas del mercado por sí solas no pueden garantizar la preservación y promoción de la diversidad cultual, condición de un desarrollo humano sostenible’ (Art. 11)”.
“Recuerda que el AGCS es voluntario y que sus principios no imponen ni la privatización ni la desregulación, y no prescriben un nivel especial de liberalización…”
“Recuerda que los servicios culturales no deben compararse con la mayoría de los demás servicios…”

Otra de arena.
Carta enviada por el Ministerio de Economía a otros Ministerios.
Madrid 10 de febrero de 2003. (Extracto).
“Según lo acordado en la Conferencia Ministerial de la Comunidad Europea y sus Estados Miembros deberán presentar hasta el 31 de marzo de 2003 ante la Organización Mundial de comercio (OMC) la oferta de liberalización en servicios.
Adjunto se envía la siguiente documentación:
-compromiso (documento de 50 páginas a dos caras) [no disponible para nosotros].
-modificación de las exenciones al principio de nación más favorecida [no disponible para nosotros].
(...) La documentación remitida es confidencial y está marcada por país destinatario. Por ello, se ruega que se extremen las precauciones para que no haya filtraciones.
(...) La aceptación de los compromisos reflejados en la oferta comunitaria implica, (sic) que la legislación española deberá modificarse, si fuera necesario, para alcanzar el nivel de liberalización que se concederá a operadores extranjeros en estos compromisos. Asimismo, no se podrá aprobar en el futuro, (sic) una legislación que limite los derechos otorgados a operadores de servicios extranjeros en estos compromisos”.
Firmado: José Alberto Plaza Tejera. Ministerio de Economía.

“Siempre nos quedará París”.
El proceso de mercantilización de la cultura genera una línea de fuerza vital para el mantenimiento del sistema globalitario. Vehículo difusor del pensamiento único, se apoya en los grandes grupos económicos que controlan los negocios de la comunicación.
La progresiva homogeneización de la multiplicidad social acompaña en este viaje a la banalización del arte como artículo de consumo.
Defender lo diverso, disfrutar el arte, vivir espacios de ocio no comercializado, defender la cultura como “excepción” respecto al puro mercado, es actualmente tan necesario y, probablemente, tan subversivo como la sunción de una responsabilidad pública y social en materia de cultura”.
Pensamiento crítico vs. Pensamiento único (pág. 250). Le Monde Diplomatique (Edición española). Debate, 1998.

Quijote 2005
“…y -respondió el cura- digo que mi escrúpulo es que no me puedo persuadir en ninguna manera a que toda esa caterva de caballeros andantes que vuestra merced, señor don Quijote, ha referido, hayan sido real y verdaderamente personas de carne y hueso en el mundo, antes imagino que todo es ficción, fábula y mentira y sueños contados por hombres despiertos, o, por mejor decir, dormidos.
-Ese es otro error –respondió don Quijote- en que han caído muchos que no creen que haya habido tales caballeros en el mundo, y yo muchas veces con diversas gentes y ocasiones he procurado sacar a la luz de la verdad este casi común engaño…”
II-Cap. 1